domingo, 24 de agosto de 2014

Lo tiene de hijo

     Central Córdoba volvió a demostrar la paternidad que tiene sobre Laferrere al vencerlo esta tarde y en el Gabino Sosa por 2-1 con goles de Martín Mustachi y Ezequiel Amilivia. Primer triunfo Charrúa en el torneo


     Se sacó un peso de encima. Y ante un rival que siempre figura en el fixture en el momento justo para que Central Córdoba pueda acomodarse, porque en los últimos años, Laferrere aparece para levantar o enderezar al Charrúa. Esta tarde no fue la excepción, ya que los de Marcelo Vivas derrotaron por 2-1 al Verde en el Gabino Sosa, ganaron su primer partido en el torneo y cumplieron una muy buena actuación en el total del encuentro. Martín Mustachi de penal abrió el marcador, Ezequiel Amilivia aumentó la diferencia, mientras que Gustavo Fernández descontó para la visita y puso cifras definitivas al marcador. El Matador volvió a exhibir un buen rendimiento y dejó las tres unidades en Rosario.

     Apenas un sofocón inicial y un penal mal sancionado por el árbitro fue lo poco que sufrió el elenco de Tablada durante los 90 minutos. Un férreo sistema defensivo que protegió de muy buena manera a Leonel Poropat y un excelente trabajo de mitad de cancha en adelante para custodiar la última línea y generar situaciones de peligro, dejó en claro que se trabajó en la semana y tuvo su rédito en el cotejo. Central Córdoba pegó en los momentos indicados y el director técnico fue clave para que su equipo dominara completamente en todo el segundo tiempo. Fue el partido ideal. 

     A los 4' minutos, Juan Brunetti se metió al área por derecha y pateó al palo, en lo que fue la única jugada de riesgo provocada netamente por el conjunto de Sergio Quiroga. En esos momentos, el Verde tenía la pelota, ubicaba mucha gente en ataque y hacía retrasar al Charrúa, que no podía recuperar la esférica. Sin embargo, esto duró hasta los 10' aproximadamente, desde cuando Dalcio Medina y Diego Díaz comenzaron a tener la bocha para asociarse entre sí y combinar con sus compañeros.

     Sin haber generado nada de riesgo en ofensiva, a los 25', Jonathan Radice ganó de guapo la posición cerca de la medialuna del área rival y, cuando se le estaba por escapar el balón por línea final, surgió el pisotón de Adrián Castro al pie de apoyo del Polo para derribarlo, suficiente para que Cristian Benitez sancionara penal. Tras las clásicas discusiones, el Gitano tomó la responsabilidad desde los doce pasos, lanzó su disparo suave y esquinado hacia la izquierda de un arquero que se tiró el mismo lado, pero jamás alcanzaría a sacarla. Gol del Charrúa que se ponía arriba.

     Con la ventaja en el tanteador, Central Córdoba continuó con el correcto toqueteo de pelota en el medio más las corridas de Diego Villagra, que pasaba de ataque a defensa y viceversa tan fácil y constantemente que lo convertiría, con el correr de los minutos, en la figura de este duelo. Y tampoco se quedó atrás con varias habilitaciones entre líneas que dejaron a sus compañeros en clara posición de convertir.

     Sobre el final de esta parte, los de Vivas casi se van con dos tantos a su favor de no ser por el manotazo de César Monasterio ante un zurdazo de Amilivia a la salida de un tiro de esquina. De esta forma, el Matador se fue al descanso controlando las acciones de esta etapa, aunque sin provocar demasiado peligro en la valla contraria. No obstante, una de las solas dos que tuvo la supo aprovechar y eso fue suficiente para que se trasladaran al entretiempo con el 1-0 a su favor frente un Laferrere manso y discreto.

     Ahora bien, en el complemento se vio la mano del DT para que su equipo fuera único protagonista del partido y amplio dominador de las acciones de juego. Adentro Pato Sánchez para disputar los restantes 45 minutos y rápida devolución del propio futbolista para la confianza que le brindó Vivas. A los 6', el zurdo robó el balón en el círculo central, ejecutó un pase largo que dejó solo frente al guardameta a Amilivia, quien probó con un derechazo fuerte al ángulo y decretó el 2-0 para Central Córdoba.

     Ante este panorama, el Verde se lanzó en ataque y fue a buscar el descuento. A los 16', la esférica estaba por derecha y, por el medio, Brunetti le propinaba un par de manotazos a Carlos Rojas que, dando muestras de juego limpio, optó por no tirarse y continuar marcándolo hasta llegar a dentro del área, desde donde el delantero se dejó caer ante la arremetida del zaguero y el juez sancionó la pena máxima. El Tortuga se hizo cargo del penal, la pelota fue para un lado y el Polaco se lanzó al otro, por lo que Laferrere se puso a tiro del empate con poco y nada generado.

     Al instante, Quiroga mandó a la cancha un cuarto delantero y agotó los variantes. Sin embargo, a los 25' minutos,  se lesionó el autor del único gol del visitante y, sin posibilidades de reingresar por dolor ni ser reemplazado, dejó con 10 a su equipo. No obstante, el Charrúa sólo pudo aprovechar esto para crear jugadas, pero falló otra vez en la definición.

     Dos claras e increíbles de explicar desperdició el Leche, a los 29' sin poder patear a centímetros de la línea y sin portero y otra cerca del final que se escapó por arriba, y un fulminante remate de Cristian Vella a los 30', que se estrelló en el ángulo. Además, Diego Díaz casi convierte de arremetida, pero Monasterio salió de su área y con su cuerpo evitó que el volante lo superara, mientras que con el tiempo cumplido fue Sánchez el que se encargó de probar de media distancia a las manos del guardameta.

     Central Córdoba controló excepcionalmente los embistes de un Verde que terminó con tres delanteros e hizo subir a sus dos más altos zagueros a cabecear. Y esto se evidenció en la poca actividad de Poropat en el complemento. Quizás, lo que se puede llegar a reprochar es la falta de precisión en los metros finales, ya que el equipo volvió a generar muchas situaciones y sólo anotó dos goles. Aunque este punto está relacionado con el mal estado del césped del Gabino Sosa, que juega en contra para cualquier formación. Afortunadamente, el segundo gol del Matador se gestó por malos piques cuando el contrario era el que intentaba dominar la pelota. Igualmente, Vivas tuvo mucho que ver en el resultado al incluir al Pato Sánchez para la segunda parte, porque el zurdo fue vital para que los de Tablada llevaran a cabo los mejores 45 minutos de este nuevo equipo. Pero no hay que olvidar el trabajo del Tero, que se corrió toda la cancha, relevó a sus compañeros y apareció también para asistirlos. En líneas generales, todos cumplieron una muy buena performance en casa.


SÍNTESIS DEL PARTIDO (Ficha estilo Olé Ascenso)

Foto: Charrúa Soy


Por Germán Casagrande (@German_Show)

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