Sigue en deuda

     Central Córdoba no tuvo la claridad necesaria para vulnerar el arco de la visita y terminó igualando sin goles con San Telmo en el Gabino Sosa. El elenco de Tablada recuperó solidez defensiva, pero continúa carente en ataque

    El Matador no pudo encontrar los espacios para convertirle a San Telmo y se debió conformar con una pálida igualdad en cero en el Gabino Sosa. El conjunto de Ariel Cuffaro Russo no tuvo grietas en la última línea y por eso pudo mantener la valla invicta en su propia meta, sin embargo, los atacantes del Charrúa volvieron a quedar en deuda y no sólo no concretaron las que tuvieron, sino que llevaron poco peligro al arco rival. Con todo ello, el empate sin goles es el reflejo exacto del trámite del partido. Salió de perdedor, pero se necesita más.

     Juan Cruz Leguizamón, un espectador de lujo. Cristian Cuffaro Russo y Alfredo Resler, las figuras del cotejo. Las funciones defensivas de Cristian Vella y Gerardo Pérez por sus andariveles, sin grandes inconvenientes. Hasta ahí, todo bien. Pero de acá para adelante, poco y nada para destacar. Pinceladas de Lucas Moya y Martín Mustachi que no prosperaron, y arremetidas de Cristian Sánchez que no contaron con profundidad. A las claras está que el mayor déficit del equipo está arriba, y es allí en donde se tiene que poner el foco. Hay que animarse a patear, quitarse el miedo de quedar en ridículo, rematar rápido cuando se ve el hueco para no otorgarle tiempo de recuperarse a los marcadores.

     Desde el arranque hasta el final, exceptuando un par de minutos para el cierre de cada etapa, fue el conjunto de Tablada quien tomó la iniciativa y el que tuvo las evidentes intenciones de salir del cero hasta último minuto. Lamentablemente, la falta de ideas y poca precisión fue determinante para ello.

     A los 8', un centro de Moya cayó en la cabeza de un Cuffaro Russo que no pudo darle con fuerzas y le quedó mansa al portero. Jugada similar, aunque con diferentes intérpretes, sucedió a los 16', con un pase de Sánchez a la testa de un Piccardo que le dio débil. Y cinco minutos después, Vella devolvió una pelota a la salida de un córner a favor y le llegó al hijo del DT, que aparece siempre en posición de gol, pero le pegó incómodo y el balón se fue cerca del palo izquierdo.

     Luego de ello, San Telmo se animó un poquito, sin demasiado peligro. A los 28', Alberto Martínez mandó un bochazo al área y encontró a un Nicolás Pizarro con un cabezazo débil a los guantes de Leguizamón. Al rato, Ricardo Segundo se anticipó en un tiro de esquina y la dejó en el techo del arco, mientras que en tiempo recuperado probó Ignacio Ruano con un zurdazo, contenido por el arquero del Matador. Todos estos fueron tiros controlados, sin tanto riesgo. 

     En el complemento, Central Córdoba entró para llevarse puesto al Candombero. Instantes de comenzada la parte final, el Cata se animó con un disparo de media distancia que salió por muy poco, en tanto que al minuto, el propio Moya habilitó a Ezequiel Amilivia, quien no pudo asentarse correctamente y, algo incómodo, ejecutó un cabezazo fácil para Sebastián Anchoverri. De San Telmo, sólo se vio algo en el cierre de este enfrentamiento.

     Tras este inicio, la visita se protegió y anuló espacios. También los de Ariel Cuffaro Russo, más allá de sufrir un fulminante disparo de Claudio Galeano que se escapó por encima del travesaño. Entre que el elenco de Jorge Franzoni se replegó y el Charrúa careció de claridad para introducirse en el área, el partido cayó en un mar de imprecisiones y se tornó aún más aburrido. Sobre el final, un cierre de Meza desde el piso y dentro del área, más un posterior desvío tras un tiro de esquina, custodiaron el cero y decretaron el empate sin goles en el Gabino

     Ariel Cuffaro Russo necesitará recuperar la presencia de Fernando Resler en el área rival y/o volver a contar con un Federico Ferrari pleno, jugador fundamental para devolverle potencia en la ofensiva. Ver la posibilidad de juntar al Gitano con Guido Gardeano para la gestación y recobrar el nivel de Meza en el medio, para cortar y ser salida limpia desde el fondo como así pregona el entrenador. Porque atrás están bien las cosas. Es verdad que queda reflejado que en los anteriores dos cotejos le marcaron seis veces, de los cuales más de la mitad fueron por errores individuales. Pero es obvio que una falla en defensa es probablemente gol del rival. Los defensores juegan a errar lo menos posible, los atacantes actúan para acertar. Y si uno del fondo se equivoca, su compañero de adelante tiene que ayudar concretando al menos una de las que el equipo genera para equiparar las acciones. Es allí donde el técnico trabajará para aprovechar la senda de duelos ante rivales accesibles para sumar unidades.

SÍNTESIS DEL PARTIDO

Foto: Francisco Orlandi

Por Germán Casagrande (@German_Show)