Volver a creer

En la vuelta de Oscar Santangelo como DT, Central Córdoba se impuso por 3 a 1 frente a Cañuelas con un doblete de Marcelo Zaen y un gol de Guido Gardeano.

"Dos caras de una moneda", no hay frase que se aplique mejor al presente del Matador. Es que, no sólo se ajusta al cambio de actitud en la gente tras el inicio de un nuevo ciclo de Oscar Santangelo al frente del equipo, sino que también se condice con el presente futbolístico del Azul. 

Este presente se ve muy reflejado en el cotejo que se disputó hoy en el Gabino frente a Cañuelas, donde el Matador tuvo altibajos notorios en ambos tiempos y aun así pudo ganarlo. ¿Será por la inyección de confianza o renovación tras el cambio?

Lo cierto es que nuevamente el elenco de Tablada logró quedarse con los tres puntos en un partido que parecía encaminado al aburrido 0 a 0. No sólo eso, pudo cosechar una victoria a pesar de no haber podido convertir 4 o 5 situaciones muy claras durante los primeros minutos. Inclusive durante el transcurso del encuentro, en dos ocasiones el palo le negó el gol a un conjunto que atacaba desesperadamente con la esperanza de convertir.

Pero no todo es color de rosa. Porque Cañuelas no vino a dejarse hacer, y también tuvo sus oportunidades de convertir. Afortunadamente para el local, Facundo Mus tuvo una buena tarde y logró detener pelotas claves para evitar la caída de su arco, aunque se deberá trabajar para no depender exclusivamente del arquero. 

Para colmo, Fernando Resler se retiró con un fuerte dolor de su rodilla, que viene arrastrando hace tiempo. Por último en la lista de malas noticias, Renzo Funes no podrá ser de la partida el próximo partido ya que llegó a la quinta amonestación y deberá cumplir una fecha afuera de las canchas. 

Respecto a los goles se puede afirmar que el penal a favor, sancionado quizás en el mejor momento de Cañuelas, fue lo que permitió abrir el arco y evitar el muy posible empate en cero. De los otros dos de los tantos del Azul mucho no se puede decir, aquellos que los vieron en directo coincidirán en que fueron lindos y letales contragolpes liderados por Pato y Pocho respectivamente que concluyeron en buenas definiciones de Zaen y Gardeano. 

Por otro lado, la única conversión del Tambero provino de un tiro libre muy cercano al área ejecutado por Mariano Campodónico que se coló por el palo izquierdo de Facundo Mus. Empero, este gol no fue suficiente y el equipo de Ruggero alargó a 6 su racha sin ganar.

En resumen, se ganó y eso es lo importante. Porque engrosa el promedio de cara al final del torneo. Porque aumenta la confianza del plantel pensando en los duros partidos que se vienen. Y sobretodo, porque ya habrá tiempo en la semana para que Santangelo pruebe y encuentre su equipo ideal, para que le cambie el aire al plantel y para que renueve el fútbol del Charrúa. 

Foto: Santiago Fraga

Franco Scarafía (@Franqo_CC)