Arañando un tanto

En una tarde de lluvia intermitente, Central Córdoba logró rescatar un empate frente a Argentino de Quilmes aunque aún así quedó muy alejado de los puestos de vanguardia. En el Charrúa, Ferrari volvió a las canchas.

Una nueva tarde de fútbol en el Gabino Sosa. Y con ella, una nueva esperanza de los hinchas charrúas de ver a su equipo remontar la situación adversa que se esta atravesando en la actualidad. Para ello, Ariel Cuffaro Russo decidía poner en el cancha a los mismos once que iniciaron el pasado cotejo frente a San Miguel. 

Además, una buena noticia arribaba para el plantel y parcialidad de Tablada. Federico Ferrari, ya practicamente recuperado de la lesión que lo dejó afuera de las canchas por casi un año, fue al banco de suplentes y, no sólo sumó minutos de fútbol, sino que también fue autor, de forma indirecta pero autor al fin, del gol del empate charrúa.

Desde el inicio, ambos equipos propusieron medirse e intentaron generar ocasiones para quebrar el cero. Mas ninguna de ellas fue realmente efectiva, por lo que ni Álex Debiase ni Adrián Leguizamón tuvieron gran trabajo durante los primeros minutos. 

El Azul no era preciso en la cancha y quizás eso, sumado a la presión de la gente, produjeron que el Mate fuera el primero en llegar con más claridad de la vista hasta el momento. Primero, a los 21' con un cabezazo suave de Valenti que se fue cerca del ángulo izquierdo del arco charrúa. Y luego, a los 36' mediante un remate de Benítez desde tres cuartos de cancha que Debiase logró contener abajo.

En tanto, el elenco de Tablada intentó pero no logró generar verdadero riesgo durante los primeros 45 minutos. La única en la que inquietó fue por medio de una jugada preparada que culminó en un remate cruzado de Leandro Figueroa que se fue cerca del palo derecho de Leguizamón.

En el complemento, si bien el Matador intentaría atacar en busca del gol, se llevaría una temprana sorpresa de su rival. Es que a los 3' un centro desde la izquierda encontró al goleador quilmeño Sergio Valenti en soledad en el punto del penal. Indudablemente, el delantero no perdonó y la puso pegada al palo izquierdo de Debiase para poner el 1-0 y darle un gran golpe anímico al Charrúa.

Pero el Azul sabe de resurgimientos. Y justamente eso fue a buscar, a base de entrega y garra, para lograr igualar las acciones en la tarde rosarina. Si bien el rival tuvo una que otra chance más con remates desde afuera del área, se dedicó más a replegarse y cuidar el resultado que a atacar. Esto, fue aprovechado por los de Cuffaro Russo para esparcirse por el campo y así llegar con más claridad. Incluso, llegó a casi tener el empate a los 9 minutos, cuando el cabezazo de Cristian Cuffaro Russo se fue prácticamente besando el horizontal.

Asimismo, no todas eran nubes negras en el cielo del Gabino Sosa. Es que, cuando el reloj marcaba los 31', Ariel Cuffaro Russo lanzó a la cancha a Federico Ferrari, reingreso que tuvo que esperar casi 10 meses por la lesión del hábil mediocampista sufrida justamente frente al Mate allá por el 23 de Mayo del 2015, en aquel emocionante 3-3 en condición de visitante.

Precisamente el Toto Ferrari, tendría una participación vital en lo que sería el empate del elenco de Tablada, acaecido minutos más tarde. A los 37', y cuando parecía que no habría tiempo para más, Guido Gardeano lideraría un contra golpe que le dejó suficiente espacio para rematar cuando se encontraba en la puerta de área. Su potente disparo se desvió en Ferrari, descolocando al arquero Leguizamón y colándose en la red para establecer la igualdad sobre el final del cotejo.

Finalmente Juan Ledo, de arbitraje regular, haría sonar su silbato para así decretar el 1-1 definitivo. Un empate que, si bien por el transcurso del partido termina siendo un punto afortunado, no es de gran utilidad para revertir la mala racha que viene arrastrando Central Córdoba y que, hoy por hoy lo posiciona entre casi entre los colistas.

Aunque ahora, el Matador tendrá otra oportunidad de revindicarse ante su gente ya que el sorteo del fixture dispuso que juegue dos cotejos consecutivos de local. El rival a vencer es Sportivo Italiano, conjunto que siempre da pelea y que actualmente se encuentra peleando en los puestos de vanguardia. Igualmente, ningún rival es imposible y el Charrúa ya ha demostrado que puede hacerle frente a cualquiera.

Foto: Conclusión

Franco Scarafía (@Franqo_CC)